n el silencio de la noche,
donde los sueños toman vuelo,
la luna canta en su broche,
un cuento de amor y anhelo.
Susurros de la tierra despiertan,
ecos de tiempos olvidados,
árboles y ríos que aciertan,
los pasos de amantes pasados.
El viento acaricia los campos,
llevando consigo el recuerdo,
de caricias, risas y encantos,
de un corazón aún en acuerdo.
Las estrellas danzan en el cielo,
en un vals eterno de luz,
reflejan el viejo anhelo,
de un amor que nunca rehúsa.
Cada hoja, cada flor, cada brisa,
cuenta historias de amor y pasión,
en el susurro suave que avisa,
de un eterno, dulce canción.
Que en la tierra, en el viento, en el mar,
se hallen los versos que encantan,
pues en ellos se puede hallar,
el amor que nuestras almas levantan.
