Alfredo Nicolas Lorenzo
Nationality: 117
Email: alfredonicolaslorenzo4@gmail.com
Nationality: 117
Email: alfredonicolaslorenzo4@gmail.com
Alfredo Nicolas Lorenzo
Alfredo Nicolás Lorenzo: Poeta, narrador y ensayista (Camagüey, 1964). Licenciado en Lengua y Literatura Hispánicas por la Universidad de La Habana en 1991. Es fundador de la revista Proposiciones de la desaparecida Fundación Pablo Milanés. Ha sido finalista del Premio de Poesía NOSSIDE CARIBE convocado por el Centro Bossio de Italia. Ha colaborado en las revistas Alforja Poesía y La Voz de Coahuila, México. Es miembro del Taller de la Creación Poética de la Fundación Nicolás Guillén. Aparece en la Antología Sonetos de amor y otros poemas, Universidad Autónoma de Coahuila, México (2003). Tiene una licenciatura en Historia del Arte, por la Universidad de La Habana en el 2009, y una Maestría en Etnología de la Fundación Fernando Ortiz. Ha tomado cursos en el Centro de Estudios Orientales sobre los asentamientos de los árabes en Cuba. Tiene en preparación los títulos Diario de las palabras y Por donde vienen los deseos (inéditos).
NOCHES
Para que la poesía siga siendo
el sustento espiritual de los humanos:
Hay noches que descubro el alma.
Hay noches que mí cuerpo
galopa en la grupa de Pegaso.
Hay noches que desvelo tus senos
para bañarme con el néctar
de tus pezones.
Hay noches que ensarto mis sueños
con el aroma de tu pubis.
Hay noches en que la cruel agonía
que me provoca la falta tuya
desnuda mi alma y me convierte
en tu guardián insomne…
Hay noches que aún no amanecen.
TIEMPO SAGRADO
A: María Antonia Serrano González
Si yo pudiera descubrir donde
descansa tu mirada. Desnudar
los secretos que cada noche
invaden tus ecuaciones.
Si yo pudiera desprender de
pétalos tu piel. Recortar las
huellas que dejas en tu enmudecida
almohada.
Si yo pudiera rescatar la distancia
que los secretos del Alba
dejaron en el callado
polvo del camino.
Sí vuelvo a ti, salvaré este
tiempo sagrado que transcurre veloz
y sembraré entre rocas,
el lirio que jamás floreció.
TUS PALABRAS
Cuántas veces los arpegios
de tu voz han herido mí naturaleza
y mis huesos húmedos de emoción
han llenado de esperma mis sábanas.
Tu aliento de terciopelo
acaricia mis oídos tras el auricular.
Celestes signos desprenden
sutiles acordes
agitando mis manos
en una complicada sinfonía.
Palpo mí torrente sanguíneo
para hallar cada gota
de esta pasión delirante
que consigues despertar en mi mente.
Clamor sensual
goce de plenitud
fluido sutil
orbitas extrañas
arden tan solo
con tus palabras.