NADA.En confesión interna he podido sentir justo eso: nada. El despertar me hace querer nada. Trabajar, sentir, correr, conducir, leer, comer, todo es lo mismo...nada.
Es el nada por ahora lo que me deja percibir la nada. Y con la nada soy feliz, porque después de haberlo tenido todo, me conformo con la nada. El crear me deja en nada. El destruir refuerza mi nada. Y de ti? Ja...ya no se nada.
Solo gracias a tí me quede en la nada. Varado, confundido, perdido, con embustes y raros contemplamientos, conmigo mismo, totalmente solo viviendo en la nada.
Y es que, la nada ha sabido exprimir de mi todo eso de lo que ya me olvide. He cambiado, y crecido, he vivido y todo queda en nada. No se si debo agradecer o quedar en silencio. De mi proceder ya no doy cuenta, a la final me importa nada. Pero quisiera escuchar de tu boca solo una palabra: 'Gracias'.
Y poderte responder en ese segundo infinito, solamente: 'de nada'.
EFÍMERO TU.Vi la luna por Guayaquil.
La vi pasar, entre ceibos y robles;
tu cara me supo a miel.
Coquetié con las estrellas
y el brazo de mar me susurró,
tu recuerdo en mi piel está.
El atardecer no quizo despertar
y el anochecer nos apareció,
este Guayaquil inmenso me absorbió.
Dentro de su corazón te siento
y no puedo desperdiciar ese momento,
aunque fugaz...intenso.
La briza cobija nuestro querer
y me invita a volver.
Perdido en tu Guayaquil interminable,
tal como me perdí en tus besos,
deseo recordarte eterno.
VAS Y VUELVES AMOR.Te vas una y mil veces amor,
y en mi alma dejas gran vacío,
solo roto por las gotas del rocío
y la esperanza de volverte a ver.
Te vas solo hoy por un momento,
como un siglo o igual como un lamento,
pausado y hambriento, miro el reloj incierto,
son las doce, vas saliendo y yo te espero.
Infinito anhelo verte y solo un haz de tiempo,
vienes a mi travieso y juguetón riendo,
con tus atributos juegas con la cola del tiempo,
y solo das un beso embelesante y hasta luego!!
Me dejas tu aroma soberano y el sabor incrustado,
como las semillas fecundas en la olorosa tierra,
y éstas echan flores primorosas y deseosas,
de hálito de trópico y frescura de fugaz viento.
Y es que quiero atrapar un segundo cálido,
quiero saber sentirte un poco más que el rocío,
y cuajar el pacto con la luna, deleitándome sereno,
sabiendo que aún de lejos, tu amor no me es ajeno.
biografia:
Alessandro Antonio CassolaUraño y complicado, a su corta edad encuentra refugio en los monemas que siendo de su agrado y de fácil redacción, comienza a crear mundos literarios.
Juehga con los estilos más no con la métrica. Ferviente dogmático del verso libre se siente libre de componer para sí, y para un ser especial, que ya no está.
Melancolía su tono, y desdén su compás.
cirbecero@gmail.com